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Crawssants frutarianos con cacao y chocolate blanco raw vegan

Te dejo hoy una receta doble: la masa para hacer estos crawssants deliciosos, que la puedes usar también para hacer bases para pasteles o magdalenas —está siempre irresistible—, y una receta para preparar chocolate blanco raw vegan con estevia líquida. Cuando compres estevia líquida, segúrate que contenga los principios activos que son precisamente la aportación medicinal de esta planta; la encontrarás sólo en herbolarios especializados.

Por si aún no te convence mi receta de hoy, te recuerdo que el chocolate (en especial el cacao en polvo, más que la manteca de cacao) es un alimento muy antioxidante. Es conveniente tomar poca cantidad, ya que el chocolate también es excitante y eso no le sienta tan bién al sistema nervioso, y tampoco le gusta al hígado, que no «es feliz» ante los excesos de grasas, por muy saludables que éstas sean. Así que, bueno, todo con mesura.

En todo caso, a mí me encanta incluir un toque de chocolate y de cacao en mis recetas y mis talleres. En el próximo, degustaremos algunas delicias chocolatier, aprovechando sus propiedades beneficiosas para el sistema cardiovascular. El chocolate, como el aceite de oliva, es muy rico en polifenoles, un tipo de antioxidante. ¿Sabías que el chocolate es fantástico para la salud del corazón y la salud vascular en general? El consumo de chocolate negro, entre otras cosas, ayuda a restaurar la flexibilidad de las arterias a la vez que evita que los glóbulos blancos se adhieran a las paredes de los vasos sanguíneos. Ambas circunstancias son determinantes en la ateroesclerosis. Pero no me voy a extender más, ya viene la receta… Si te interesa saber más sobre los talleres de Kijimuna’s Kitchen puedes encontrar más información en este link.

Bueno, aquí la receta. Espero que te guste.

Tiempo de preparación: 30 min Tiempo de cocción: no necesita Listo en: 8–12 h
Para aproximadamente 6 mini crawssants

Ingredientes

Para la masa del crawssant
1 mango bien maduro o 90 gr de mango deshidratado y rehidratado
1/2 taza de cacao en polvo
1/2 taza de azúcar de coco, molido fino
1/2 taza de algarroba cruda molida
1/2 taza de semillas de chía, recién molida

Para las puntas del crawssant
100 gr de manteca de cacao o 100 gr de chocolate blanco raw vegan

Para el chocolate blanco (para 225 gr de chocolate blanco)
80 gr de anacardos, molidos hasta conseguir una textura de harina muy suave
1/8 c. pequeña de estevia líquida, con los principios activos
1 pellizquito de sal fina del Himalaya
225 gr de manteca de cacao

Para decorar
sirope de arce, al gusto (no es raw pero sí es vegan)
semillas de sésamo blanco, al gusto

Método de preparación

Colocar los ingredientes para la masa, excepto la chía, en una batidora de vaso y batir hasta obtener una crema suave y homogénea. Añadir la chía recién molida a la batidora y volver a batir hasta mezclar bien. Dejar reposar unos 5 minutos para que la chía absorba el exceso de líquido y se esponje. La masa debe quedar modelable.

Repartir  la masa sobre papel de hornear o las láminas de teflex del deshidratador. La masa debería alcanzar para tres láminas rectangulares de de 20 cm de largo por 8 cm de ancho. Con una espátula, recorta dos triángulos dividiendo en dos cada rectángulo en diagonal. Cada triángulo tendrás una base de aproximadamente 8 cm y un largo de 20 cm.

Hagamos el primer crawssant. Haz un corte en la base del rectángulo (su lado más corto) de un cm aproximadamente y enrolla desde la base hasta la punta dando forma de media luna. Repetir con el resto de la masa. Debieras obtener unos 6 mini crawssants.

Colocar en las bandejas del deshidratador y deshidratar a 50 ºC durante una hora, para que quede un poco más crujiente por fuera, y seguir deshidratnado a 42 ºC durante 8 horas.

Dejar enfriar los crawssants. Mientras se enfrían, derretir la manteca de cacao al baño María.

Bueno, ahora es el momento de decidir si quieres bañar las puntas de los crawssants en manteca de cacao pura o en chocolate blanco raw endulzado con estevia. La receta para este chocolate es para 225 gr., no lo vas a usar todo para las puntas de los crawssants; pero si te animas puedes usar el chocolate blanco raw restante para hacer bombones blancos o bañar fruta fresca o para lo que tu imaginación te diga… Sigamos con al receta.

Si vas a bañar las puntas del crawssant sólo en manteca, una vez disuelta la manteca al baño María, retira del baño María. Sigue removiendo con una espátula hasta que la manteca espese un poquito, debe estar a una temperatura de unos 31.5 ºC para estar lista o tener un textura un poco más líquida que la miel. Y ya puedes cubrir las puntas de los mini crawssants mojándolos en la manteca derretida y atemperada —atemperar es como se llama este proceso de derretir el chocolate y luego bajarle la temperatura sin dejar de remover ya sea mezclándolo con otros ingredientes como endulzantes, vainilla, etc. o en su estado más puro; sólo así te aseguras que el chocolate resultante sea crujiente al endurecer, no se derrita a temperatura ambiente y que brille con esa luz propia.

Si en vez de manteca decides hacer chocolate blanco endulzado con estevia, derrite la manteca igual que antes y bate todos los ingredientes para el chocolate blanco en una batidora de vaso y atempera el chocolate blanco resultante como se explica más arriba. Cuidado con no sobrecalentar la mezcla, después de todo, nos tomamos la molestia de que todo sea crudo es para preservar el máximo de nutrientes de nuestros alimentos. Y, ya sabes, si te da pereza preparar el chocolate blanco crudo, con sólo la manteca también está delicioso, ya que la manteca se combina en boca con el resto de ingredientes que no son mantecosos y que ya están enculzados con la fruta y el azúcar de coco.

Una vez has bañado las puntas de los crawssants, deja reposar sobre un papel de horno, papel encerado o las láminas de teflex del deshidratador durante unos 15–30 minutos hasta que el chocolate o la manteca estén sólidos y se puedan despegar del papel o lámina. Si es verano, y un verano tórrido (como a veces pasa en el Mediterráneo), igual quieres dejar que la manteca o el chocolate se endurezca en la nevera. ¡Adelante!

Una vez el chocolate o la manteca ya estén sólidos, sirve los crawssants en platos o una fuente de repostería. Moja un pincel de cocina en un poco de sirope de arce (o tu sirope preferido) y pinta los crawssants por encima. Decora con semillas de sésamo blanco al gusto. ¡Acabados y deliciosos!

Los crawssants estarán aún con un toque húmedo por dentro y semi-cruijentes por fuera. Los puedes guardar en la nevera o un lugar fresco durante unos tres días o quizá cinco días. Pero por experiencia, te aseguro que no duran ni un día, y tampoco medio. ¡Ha!

Ah, y si te animas a prepararlos, no te olvides de compartir alguna foto con Kijimuna’s Kitchen. Ni te imaginas la ilusión que me hace recibir vuestras fotos poniendo en práctica mis recetas saludables y 100% sabor.

¡Bon appétit!

2 comentarios

  1. Pamela dice

    Se puede usar otra fruta en lugar del mango? Es q no m gusta el olor ni el sabor del mango. tal vez se podria usar platano?

    • Consol @ www.kijimunas-kitchen.net dice

      Hola, Pamela,
      pues no lo he probado con plátanos y otros ingredientes. Pero seguro que funciona.
      El plátano a mí me gusta deshidratarlo tal cual, sólo lo corto a lo largo y lo deshidrato. Hago rollitos y los baño en chocolate. Súper ricos.
      Prueba, seguro que no es problema. También puedes probar con melocotones, albaricoques frescos, incluso fresones.
      Si pruebas, cuéntame. ¡A mí es que me encanta el mango!

      Un abrazo,

      K