Dulces sin culpa, Entrantes, Recetas

Heladitos deliciosos de piña y cilantro

Hace unos días que he vuelto de mis micro vacaciones.

He aprovechado para quedar con amigos y conocidos, personas muy especiales. Me encanta quedar con amigos y hablar de cosas que importan y también de cosas que no importan; compartir unos minutos, unas horas, unos zumos, unos rayitos de sol o el frescor de la noche; intercambiar opiniones, ideas, inquietudes; hacer preguntas, dar repuestas, plantear hipótesis. Y, lo mejor, adoro compartir ideas y momentos con los que construir, seguir construyendo, de manera individual o con otras personas de ideas e intereses afines.

Las micro vacaciones me sentaron genial. Es como si hubiese estado meses descansando. Sé que se lo debo no sólo a los momentos de desconexión, al cambio de entorno, a las actividades diferentes, al clima fantástico del verano, a los estímulos nuevos, sino a todas estas personas con las que he podido compartir aunque fuese unos segundos y hablar de pocas cositas, pero cargadas de significado. He vuelto con energías renovadas y con ganas de seguir haciendo mil cosas en la misma línea de estos últimos años, desde que comencé a escribir este blog, hace ya más de cuatro años atrás.

Así que estos últimos días estoy un poquito más activa de lo normal, con mil ideas y unas cuantas recetas inspiradas en las últimas vivencias.

La receta que te dejo hoy es una de éstas. Es sencillísima, pero deliciosa. Me fascina cuando las recetas sencillas son tan increíblemente ricas y saludables. Ésta es apta para todas las edades y condiciones y de lo más digestiva. Sólo lleva dos ingredientes y amor a a borbotones. A ver qué te parece. Es una receta para hacer «helados de hielo». Aunque es un hielo sin agua añadida, sólo contiene el agua de la fruta. Te sorprenderá seguro, ya que tiene una textura completamente diferente; no es tan duro ni tan frío como el agua congelada y es una delicia para las horas de más calor del verano.

Para prepararlo, necesitarás moldes para hacer helados. Son muy comunes en las tiendas donde venden menaje de cocina. Si no los encuentras, siempre puedes improvisar utilizando vasitos.

Ingredientes

1/2 piña madura, pelada y troceada
4 c. soperas de cilantro picadito

Método de preparación

Colocar la piña en una batidora de vaso y batir hasta obtener una mezcla muy suave y homogénea. Añadir el cilantro y mezclar con una cuchara de madera. No volver a batir, el cilantro tiene que quedar tal cual, picadito fino con el cuchillo.

Reparte la mezcla en los moldes para hacer helado. Deja como 1 cm del molde vacío, porque al congelar la mezcla aumentará de volumen y no queremos que se desborde del molde.

Coloca los moldes para helados en el congelador y congela durante una hora.

Ahora es el momento ideal para colocar el palito de los helados. Coloca un palito clavándalo en una de las mezclas vertidas en el molde y asegúrate de que se sujeta bien, si no, quiere decir que tienes que dejar congelar la mezcla un poco más. Si el palito se aguanta, fantástico. Coloca todos los palitos clavándolos en el batido de piña semicongelado de los moldes y congela de nuevo hasta que esté completamente endurecido; como unas seis horas.

A la hora de servir, retirar los moldes de helado del congelador unos 5 minutos antes de consumir. Estira del palito y verás qué increíblemente fácil se desmoldan todos los helados.

Estos helados los puedes disfrutar entre horas, como postre e incluso como un entrante muy original en tus comidas de verano. Verás, una maravilla de lo más sencillo con la que sorprenderás y regalarás salud a tí y a los que te rodean.

¡Bon appétit!